El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson anunció que el 27 de enero de 2022 expirarán la mayor parte de las restricciones sanitarias por COVID-19 en Inglaterra. Por ello, la población no estará obligada a usar cubrebocas y se retirará la recomendación de realizar home office. "Es debido a la extraordinaria campaña de refuerzo, junto con la forma en que el público ha respondido a las medidas del Plan B, que podemos volver al Plan A en Inglaterra. Además de permitir que caduquen las regulaciones del Plan B", afirmó Johnson en su cuenta de Twitter.
Según el primer ministro, los datos de las autoridades indican caída en niveles de propagación de la variante ómicron al alcanzar el punto más álgido a nivel nacional. "Es un reflejo de la intención del gobierno de confiar en que los ciudadanos británicos tomen decisiones adecuadas", dijo Johnson durante su participación en la Cámara de los Comunes el 19 de enero de 2022. De acuerdo con el Centro de control de coronavirus del Reino Unido, se han aplicado 136 mil 792 383 vacunas hasta el 18 de enero de 2022. Por su parte, el número acumulado de personas que han recibido un refuerzo o tercera dosis de vacunación contra la Covid-19 supera los 36 millones.
En este sentido, restricciones sanitarias como el uso de cubrebocas en espacios públicos y el tele trabajo ya no serán obligatorias. Por su parte, el Departamento de educación del Reino Unido informó que los directores de salud pública también continuarán asesorando a entornos educativos que experimenten brotes. Cualquier introducción local de cubrebocas estará sujeta a revisión rutinaria y se eliminará lo antes posible.
Además, esperan que el certificado de vacunación no sea un requerimiento sanitario para asistir a reuniones multitudinarias. "A medida que la covid-19 se hace endémico, tendremos que sustituir los requisitos legales por consejos y orientaciones, instando a las personas con el virus a ser cuidadosas y consideradas con los demás", dijo Johnson.
Boris Johnson anticipó también que se eliminarán las restricciones sanitarias que obligan a las personas a confinarse cuando se da positivo a Covid-19. Esta medida podría eliminarse el 24 de marzo de 2022 o incluso antes si las cifras de contagios disminuyen.
