Ginger Thompson, excorresponsal del New York Times en México, fue la periodista que informó del arresto en Texas de Genaro García Luna el pasado 10 de diciembre a través de un hilo en Twitter. Este jueves, volvió a revelar que presuntos nexos entre funcionarios de la extinta Policía Federal y el narcotráfico.
De acuerdo con la hoy reportera del medio estadounidense ProPublica, una corte federal de Estados Unidos acusó a Luis Cárdenas Palomino y a Ramón Pequeño García de trabajar para el narcotráfico, como lo hizo el secretario de Seguridad de Felipe Calderón con el Cártel de Sinaloa, motivo por el que está en una cárcel en Nueva York en espera de que inicie su proceso.
"El gran jurado encontró que en lugar de combatir a los cárteles de la droga, existe evidencia que los funcionarios colaboraron con ellos y aceptaron sobornos", escribió Thompson. A ambos se considera como los miembros del círculo más cercano de García Luna en la PF.
"Las acusaciones evidencian una impresionante caída en desgracia para Ramón Pequeño García y Luis Cárdenas Palomino, quienes habían sido celebrados por funcionarios estadounidenses como guerreros confiables en la lucha contra los cárteles mexicanos de la droga", indicó la periodista.
Cárdenas Palomino es recordado por haber dirigido en 2007 el telemontaje en el que se detuvo a la francesa Florence Cassez y al mexicano Israel Vallarta por secuestro. Desde 2013, el policía fue reclutado por el empresario Ricardo Salinas Pliego en la dirección de Adamantium Private Security Services, una filial del Grupo Salinas especializada en espionaje y seguridad privada.
Santiago Nieto de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda reveló en mayo de este año que presentó dos denuncias vinculadas con el caso García Luna que implicaba a Luis Cárdenas Palomino, exencargado de Seguridad Regional de la PF. "Además de que se ha proporcionado la información a los fiscales en New York para el procesamiento del caso", dijo el funcionario.