Hacinamiento en lugares públicos, especialmente antros y bares, en Sayulita no hay “sana distancia” ni respecto a lineamiento de salubridad, mientras que según leyes estatales, las playas, que son espacios abiertos, permanecen cerrados.
Reglamentos del municipio hace “oídos sordos” a quejas de vecinos de esa demarcación que con asombro y preocupación ven que los negocios no esenciales como son las cantinas, están abiertas y rebosan de parroquianos de la localidad y también provenientes de otros lugares que conviven, mientras el gobernador Antonio Echevarría pone severas restricciones a muchas actividades en el estado para salvaguardar las vidas de los nayaritas ante la pandemia del COVID-19, cvomo por ejemplo el cierre de playas.
En redes sociales circulan quejas contra la autoridad municipal porque no pone orden en el desorden que prevalece en Sayulita, donde se quejan de negocios abiertos que aglutinan personas, lo cual representa un riesgo para la salud del resto de los sayulitenses que sí respetan los reglamentos.
A continuación una de varias quejas tomadas de Facebook en contra de las autoridades municipales de Reglamentos que no se echan una vueltecita por el popular poblado, para verificar que las leyes se respetan:
Denuncia Ciudadana: No Están de Acuerdo con el Cierre de Playas en Nayarit.
“El Gobierno del Estado es incongruente en su actuar.
Y eso hace que la gente pierda la confianza, respeto y credibilidad. Se enfocan en cerrar playas, en retirarte de los espacios públicos.
¿Y lo de más?
Esto fue en Sayulita el sábado Bares y Restaurantes hasta full.
Esto es lo que hace una incongruencia en el actuar de las Autoridades, por eso la gente reniega y se manifiesta en contra del plan del Gobierno.
Por qué en una área donde es libre y el contagio tenga una probabilidad menor se enfocan y en otro donde la probabilidad de contagio es más alta simplemente no hacen mucho.”
“No se puede llegar muy lejos con un Gobierno incapaz y un Pueblo rebelde”.
Hasta ahí una de tantas quejas de sayulitenses expresadas por Facebook. Ayer viernes, nuevamente los bares y antros lucían desde antes de que se ocultara el sol, a reventar, y la autoridad municipal brillando por su ausencia en el poblado.