Un alto a la impunidad de los delitos piden desde la Coordinación General del Consejo Estatal de Seguridad Pública.De acuerdo a un estudio realizado en los principales delitos cometidos en el estado durante el 2019 se detectó que en robo a banco no se registró ninguna sentencia y en otros como homicidio culposo, robo de vehículo y violencia familiar el nivel de impunidad es de 99 por ciento.
Los resultados de Ciudadanos Evaluando y del Estudio sobre Seguridad y Justicia arrojaron que en promedio en los 10 principales delitos que se registran en Sinaloa hay una impunidad del 96 por ciento lo que coincide con el Índice Estatal de Desempeño de Procuradurías y Fiscalías 2019, elaborado por la organización nacional Impunidad Cero, que señala que la probabilidad de esclarecimiento de un delito en Sinaloa es de 1.4 por ciento.
En 2019 se registraron 23 mil 443 carpetas de investigación en todo el estado por diversos delitos.Ese mismo año se dictaron 45 sentencias condenatorias, equivalente al 0.19% del total de carpetas, y se emitieron 10 sentencias absolutorias, es decir, 0.04 por ciento.
Además, se dictaron 570 sentencias condenatorias en procedimiento abreviado, un proceso donde el imputado admite haber cometido el delito y acepta pagar la pena impuesta por un juez.
Esta cantidad equivale al 2.43 por ciento del total de carpetas iniciadas en el año.
Cabe destacar que las sentencias no necesariamente corresponden a delitos que se cometieron en 2019, pues se contemplan todas las emitidas el año pasado bajo el Sistema de Justicia Penal Acusatorio, ya sean de casos ocurridos en 2019 o años anteriores.
Ricardo Jenny del Rincón, Coordinador General del CESP, dijo que el nivel de impunidad en Sinaloa debe preocupar y ocupar a las autoridades de todos los niveles, pues aumentar los índices de justicia es clave para disminuir la incidencia delictiva, motivar la denuncia ciudadana y mejorar la percepción de seguridad.
Aclaró que la justicia no le corresponde solamente a una institución, sino que involucra a diversas áreas y procesos que deben fortalecerse y articularse bien entre sí para brindar resultados, desde la parte preventiva hasta la readaptación social, pasando por la procuración y la administración de justicia.