La Riviera Nayarit se ha consolidado como uno de los destinos gastronómicos más importantes del Pacífico mexicano gracias a sus mariscos frescos y preparaciones tradicionales heredadas de generaciones de cocineros costeros. Desde palapas sencillas frente al mar hasta restaurantes de alta cocina, el pescado y los camarones son la base de platillos que hoy son carta de presentación del estado ante turistas nacionales y extranjeros.
Más allá del famoso pescado zarandeado, la costa nayarita ofrece caldos espesos, ceviches, aguachiles y guisos que mezclan técnicas prehispánicas con ingredientes contemporáneos, creando una cocina viva que sigue en evolución. Para quienes visitan Nayarit, conocer estos mariscos es una manera directa de entender la relación histórica entre las comunidades costeras y el océano.
Qué hace única a la gastronomía costera de Nayarit
La cocina de mar en Nayarit se distingue por tres elementos clave: el uso de producto recién capturado, las técnicas de cocción al carbón y a la leña, y el protagonismo de chiles secos y cítricos en los adobos. En pueblos como San Blas, Matanchén, La Cruz de Huanacaxtle o Bucerías es habitual que los pescadores surtan directo a las cocinas, lo que permite servir pescado y mariscos prácticamente del mar al plato.
A diferencia de otras regiones del Pacífico, en la costa nayarita se ha popularizado el uso de chiles locales, como el chile “cora” o variantes regionales de guajillo y cascabel, que aportan un picor aromático más que agresivo. Esto, combinado con el jugo de limón y, en algunos casos, naranja agria, da como resultado salsas intensas pero equilibradas que se han vuelto emblema de la región.
Pescado zarandeado, el clásico nayarita
El pescado zarandeado es el platillo insignia de Nayarit: se prepara tradicionalmente con especies como huachinango, pargo o robalo, abiertos en mariposa, marinados con una mezcla de chiles secos, ajo, cítricos y especias, para luego asarse a las brasas en una rejilla especial. El nombre proviene precisamente de la “zaranda” o rejilla metálica que permite voltear el pescado completo sobre el carbón sin que se deshaga.
En la Riviera Nayarit es común encontrar pescado zarandeado en palapas de playa en destinos como Bucerías, La Cruz de Huanacaxtle, Punta de Mita y San Blas, donde se sirve acompañado de tortillas hechas a mano, ensalada sencilla y salsas de la casa. Para el visitante, compartir un pescado entero en el centro de la mesa se vuelve una experiencia casi ritual, ideal para familias y grupos que buscan una comida larga frente al mar.
Ceviches, aguachiles y cocteles de mariscos
Otro pilar de la gastronomía nayarita son los ceviches y aguachiles, que aprovechan la frescura del producto marinado en jugo de limón con chiles y hierbas. En muchas comunidades costeras es habitual encontrar ceviche elaborado con pescado blanco picado finamente, mezclado con jitomate, cebolla, pepino, zanahoria rallada, cilantro y chiles, servido sobre tostadas o en vasos.
El aguachile nayarita suele llevar camarones crudos o ligeramente cocidos, bañados en una salsa de limón, chiles verdes, cilantro y, en ocasiones, frutas como mango o piña, lo que le añade un toque fresco y tropical muy asociado a la Riviera Nayarit. Cocteles de camarón, pulpo y callo de almeja completan la oferta, convirtiéndose en la entrada ideal antes de los platos fuertes de pescado a las brasas.
Tlaxtihuil, chicharrón de pescado y otros guisos tradicionales
Más allá de los platillos más fotografiados, la cocina nayarita conserva preparaciones menos conocidas pero igual de representativas, como el tlaxtihuil, un caldo espeso a base de maíz y camarón que combina técnicas de atole con el sabor profundo de los mariscos. Este platillo se asocia a comunidades costeras y lagunares donde el maíz y el camarón han sido básicos de la dieta desde hace siglos.
También destaca el llamado chicharrón de pescado, elaborado con trozos de pescado frito hasta quedar crujientes, ideales para acompañar con limón, salsa y tortillas recién hechas. En puestos y marisquerías de la costa, estos guisos se complementan con tostadas de marlín, empanadas de camarón y tacos de pescado, configurando una carta que mezcla antojo callejero con tradición marinera.
Dónde comer mariscos locales en la costa de Nayarit
La Riviera Nayarit agrupa más de 300 kilómetros de litoral, y prácticamente en cada playa hay una o varias palapas donde se sirven mariscos preparados al estilo local. Destinos como San Blas, Matanchén, Los Corchos, Playa Platanitos, Nuevo Vallarta, Bucerías, La Cruz de Huanacaxtle, Punta de Mita y Sayulita concentran una alta densidad de restaurantes que han perfeccionado estas recetas para un público turístico cada vez más exigente.
Para quienes parten de Tepic, el recorrido puede planearse como una ruta gastronómica que comienza en el corazón histórico de la capital —con la Catedral como punto de referencia— y desciende hacia distintos puntos de la costa en trayectos de entre una y dos horas por carretera. Esto permite combinar visitas culturales en la ciudad con escapadas de un solo día a la playa, enfocadas en probar mariscos frescos.
Consejos para disfrutar mariscos frescos y seguros en Nayarit
Al momento de elegir dónde comer, conviene fijarse en la rotación de producto: marisquerías con alta afluencia suelen trabajar con pescado y mariscos que no pasan mucho tiempo en refrigeración, lo que mejora sabor y textura. También es recomendable preguntar por las especies de temporada, ya que los pescadores locales ajustan sus capturas según las vedas y la disponibilidad natural del océano, lo que contribuye a un consumo más responsable.
En preparaciones crudas o semicrudas, como el ceviche y el aguachile, los especialistas recomiendan verificar la higiene del lugar, la temperatura de conservación y el uso de agua potable y hielo limpio, especialmente en puestos ambulantes o palapas muy rústicas. Para quienes visitan Nayarit con niños, personas mayores o con estómagos sensibles, es preferible optar por opciones bien cocidas, como el pescado zarandeado o los mariscos fritos, y moderar el nivel de picante.



