Tepic.- En el recuerdo quedan las alarmantes cifras de muertes por homicidio que se registraron en los años 2010, 2011 y 2017, donde la violencia del narcotráfico aterrorizó a Nayarit.
De acuerdo con último reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), actualmente la entidad nayarita vive uno de sus periodos más seguros y pacíficos de los últimos tiempos, registrando en 2020 su tercera cifra más baja de defunciones por homicidio en 12 años.
Sin embargo, algo que destaca en el nuevo informe del INEGI es que en todos los repuntes de casos de homicidio en Nayarit hay una coyuntura en común: el cambio de administración gubernamental estatal.
Como seguramente lo recuerda la sociedad nayarita fue en 2010, el año que se observó uno de los incrementos de asesinatos más impresionantes de los últimos años, en pleno final de sexenio del ex Gobernador Ney González Sánchez.
A diario las páginas de la nota roja se llenaban de personas asesinadas, mientras que en las calles de toda la entidad, familias enteras lloraban por el deceso de uno de los suyos.
Prueba de ello es que los homicidios aumentaron en más del 173 por ciento, en el periodo de 2009 a 2010. Violencia que recrudeció con el pasar de los meses ya que para 2011 la cifra de fallecidos por asesinato aumentó a 587, la más alta en los últimos años.
La llegada del nuevo Gobierno significó un periodo de paz y tranquilidad para los nayaritas, bajo el yugo de una Fiscalía General de Nayarit encabezada por Edgar Veytia y la llamada fuerza élite conocida como Policía Nayarit.
Para 2012, las cifras de homicidio tuvieron un decremento de 51.44 por ciento, descenso que se mantuvo hasta el año 2015 donde Nayarit alcanzó su cifra más baja de este rubro, ya que solo se reportaron 144 casos de estos crímenes, mientras que en 2016, año previo a un nuevo episodio oscuro, se registraron solo 149 delitos de este tipo.
Cifras menores a las presentadas por los Estados vecinos, ya que mientras Nayarit promediaba 12 homicidios por cada 100 mil habitantes, Jalisco promedió 15 delitos de este tipo; por otro lado, en Sinaloa corría la sangre con un promedió de 48 asesinatos, una cifra que duplicaba la tasa nacional de ese entonces.
Pero en el ideario de muchos nayaritas, este periodo de paz escondía bajo sombreros y pasamontañas una bomba de tiempo que pronto detonaría. Y así fue, el 29 de marzo de 2017 se confirmaba en medios de todo el mundo la detención del Fiscal General Edgar Veytia en Estados Unidos por presuntos nexos con el narcotráfico.
El hecho desestabilizó la fuerzas de seguridad estatales, en un periodo donde la violencia recrudeció en todo el país, aumentando la tasa de homicidios en más de 30 puntos, pasando de 24 mil 559 homicidios en 2016 a 32 079 en tan solo un año.
La imagen del ex Gobernador, Roberto Sandoval y del priismo en Nayarit se desgastó ante la opinión pública que los vinculaba abiertamente a los presuntos delitos cometidos por el ex Fiscal y a la nueva escalada de violencia que se sufrió en 2017, ya que por cada 100 mil habitantes en Nayarit, 38 personas eran asesinadas, cifras que solo son superadas por el funesto año 2011.
Para las elecciones de 2017, la sociedad nayarita apostó por el proyecto de Antonio Echevarría García, hijo de un ex Gobernador, que en calidad de ciudadano independiente encabezó la alianza opositora que conformaban los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT).
Y aunque para 2018, la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes se ubicaba por encima del promedio del país, para 2019 el número de crímenes de este tipo descendió un 43.66 por ciento.
Mientras que para 2020, la tasa de homicidios bajo a más de la mitad, reportándose solo 15 asesinatos por cada 100 mil habitantes, cifra muy por debajo de la media nacional.
Actualmente, Nayarit es la tercera entidad con mejor posicionamiento en el rubro de Seguridad y Justicia que analiza el Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO), puesto que empata en los informes de la Comisión Nacional de Seguridad que presenta la Presidencia de México.
“La aspiración es irnos al segundo lugar”, sentenció el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana en la entidad, Jorge Benito Rodríguez Martínez para posteriormente revelar que los casos que más preocupan ahora mismo en Nayarit son los de violencia doméstica y robo tanto a casa habitación, como de vehículos.
Sin embargo, hoy en día el fantasma de la violencia homicida ronda la entidad nayarita, ya que se acerca el cambio de Gobierno y la nueva administración teme que se desaten enfrentamientos armados entre civiles.
Ante esto el Gobernador Electo, Miguel Ángel Navarro Quintero ha decidido ratificar a Jorge Benito Rodríguez como el encargado de la seguridad pública de la entidad, mientras que reiteró su respaldo a la designación del Fiscal General, Petronilo Díaz Ponce.
“El fiscal debe durar nueve años, pero tengo la voluntad política para que continúe una vez que culmine su encargo. Ha hecho un buen trabajo en comparación de quien le antecedió”, señaló Navarro Quintero en entrevista con Antonio Tello.
Así mismo, el próximo Secretario General de Gobierno, Juan Antonio Echeagaray Becerra pidió al Fiscal General reforzar la seguridad ante la amenaza que existe en el cambio de estafeta.
“Definitivamente que hay temas que tenemos que atender con prontitud, sobre todo cuando hay un cambio de Gobierno, se vienen los movimiento de los grupos delictivos que quieren desestabilizar la entrada de los nuevos de los nuevos Gobiernos. En ello está el reforzar, sobre todo la seguridad en las fronteras de nuestro Estado“, señaló el reconocido jurista.