Muy difícilmente el veredicto iba a ser diferente. No había margen para ello. Las imágenes del policía blanco presionando con su rodilla el cuello de un hombre afroamericano que pedía lo dejaran respirar y que no soportó más de 9 minutos dieron la vuelta al mundo en mayo del año pasado. Aquel corpulento varón perdió la vida ese día.
Este martes, Derek Chauvin, acusado del homicidio de George Floyd, fue encontrado culpable por un jurado de Estados Unidos y luego de varias semanas de audiencias donde pruebas y declaraciones de testigos fueron los protagonistas.
Más temprano, previo a la resolución de la corte, el presidente Joe Biden, había calificado como "abrumadoras" las pruebas, y pidió un veredicto "correcto".
Chauvin enfrentaba cargos por asesinato en segundo grado, asesinato en tercer grado y homicidio en segundo grado.
Floyd murió el pasado 25 de mayo de 2020 cuando Derek Chauvin y otros policías intentaron arrestarlo en la ciudad de Minneapolis.
El dramático fallecimiento de Floyd, provocó una movilización global contra el racismo y convirtió el juicio en algo más que un proceso contra un agente. El proceso más mediático en años, quizá en décadas.
Amanda Mars, en una publicación para El País, dio a conocer las claves de esas tres semanas de juicio.
Un trágico día de homenaje a los caídos.
El 25 de mayo de 2020, que era un lunes festivo en Estados Unidos, la policía de Minneapolis recibió la llamada del dependiente de un comercio, Cup Foods, denunciando que un hombre había comprado tabaco con un billete falso de 20 dólares. Los agentes acudieron y detuvieron a George Floyd, de 46 años, que se hallaba dentro de un automóvil aparcado junto a la tienda. En un principio, Floyd opuso resistencia, pero en poco tiempo fue doblegado. Tumbado en el suelo, boca abajo, el agente Derek Chauvin lo mantuvo inmovilizado con la rodilla sobre su nuca durante más de nueve minutos, pese a que había dejado de resistirse y gritaba que no podía respirar. En los últimos minutos la víctima estaba inerte y el agente no levantó la presión ante el estupor del público presente. Otros dos policías le ayudaron en la inmovilización y otro controlaba a los viandantes. Estos también afrontan cargos, aunque de menor gravedad, y serán juzgados más adelante.
El marco legal de la inmovilización con la rodilla. El bloqueo con la rodilla sobre el cuello es una técnica legal ante un detenido que se resiste o se muestra agresivo, si bien departamentos de policía de diferentes Estados la han prohibido por violenta y por los riesgos que conlleva. En Minneapolis estaba permitida, pero la Fiscalía se ha centrado durante el proceso en que Chauvin la utilizó durante un tiempo prolongado sin que, como se ve en las grabaciones, Floyd se moviese o se mostrase peligroso. Uno de los testimonios clave del juicio ha sido precisamente el del jefe de la policía local, Medaria Arredondo, quien acusó al agente de violar la política del cuerpo: “Una vez Floyd dejó de resistirse, debió parar”. Además, también incumplió el deber de proporcionarle ayuda médica cuando se mostró inconsciente.
Drogas, asfixia y causa de la muerte.
La defensa de Chauvin ha tratado de argumentar que Floyd falleció por el efecto de las drogas que había consumido y no por asfixia. El informe toxicológico recoge que el fallecido tenía en su organismo fentanilo y metanfetaminas, pero los expertos médicos aportados por la Fiscalía -un experto en el aparato respiratorio, Martin J. Tobin, y un facultativo del Departamento de Policía de Louisville, Bill Smock- sostuvieron que la muerte ocurrió por falta de oxígeno. Smock, en concreto, aseguró que el comportamiento de Floyd no era compatible con el de una persona con sobredosis de fentanilo. Por el contrario, el exjefe médico del Estado de Maryland, David Fowler, llamado a declarar por la defensa, señaló que no estaba probado que la rodilla de Chauvin hubiese provocado daños y que Floyd murió principalmente por sus problemas de corazón, aunque sí admitió que el paro cardíaco podría haberse revertido de haber recibido atención médica adecuada en los minutos posteriores tras quedar inconsciente.
Los cargos y la dificultad de condenar a un policía.
Chauvin está acusado de tres cargos: homicidio imprudente en segundo grado; asesinato en segundo grado, que implica intención en el instante, pero no premeditación ni voluntad previa; y asesinato en tercer grado, que el Estado de Minnesota define como el cometido por alguien que, aunque no busca el objetivo de matar, causa muerte actuando de forma peligrosa, con una mentalidad depravada y sin cuidado por la vida humana. Pocos policías son acusados en Estados Unidos de algunos de estos delitos por hechos ocurridos en acto de servicio y menos aún, condenados. El profesor de Justicia Penal de la Universidad de Ohio, Philip M. Stinson, calculó que, desde 2005, sólo 121 han sido imputados, cuando las muertes a manos de la policía ascienden a un millar al año. El principal motivo es que, según una decisión del Tribunal Supremo de 1967, las violaciones de derecho por parte de las fuerzas del orden, cuando se llevan a cabo “de buena fe”, en una operación, gozan de “inmunidad cualificada”. En 2015, el mismo tribunal precisa que esto se aplicaría salvo que se trate de la violación de derechos “reglamentarios y constitucionales claramente establecidos”, lo que no ha solucionado el problema.
Un jurado ante la historia.
El reverendo neoyorquino Al Sharpton, histórico y controvertido activista por los derechos civiles, dijo poco antes de comenzar el juicio: “Chauvin está en el banquillo, pero Estados Unidos está siendo juzgado”. Eso es precisamente lo contrario que se le ha pedido al jurado, una docena de hombres y mujeres del condado de Hennepin que, en resumen, deben determinar si Chauvin causó la muerte a Floyd con su rodilla o contribuyó a ella, pero cuya decisión va a marcar la historia. El tribunal intenta elegir a los miembros de un jurado entre personas que no tienen opiniones preconcebidas sobre un caso. Esta vez ha sido imposible. La mayoría ha visto al menos fragmentos del vídeo y 10 de los 15 seleccionados (dos son suplentes y otro abandonó) admitieron tener una opinión “algo negativa” del acusado, si bien parecían moderados y se veían capaces de dejar al margen sus prejuicios.
Este martes, los 12 miembros del jurado declararon a Chauvin culpable de homicidio accidental, homicidio no intencional con desprecio por la vida y homicidio no intencional en la comisión de delito grave.
¿Qué viene ahora? Después de que el juez Peter Cahill leyó y confirmó el veredicto con el jurado, anunció los próximos pasos técnicos, incluida la programación de la sentencia en ocho semanas.
Cahill dijo que el tribunal examinaría los argumentos escritos de Derek Chauvin «dentro de una semana» y emitiría conclusiones fácticas al respecto. Luego ordenarán un informe de investigación previo a la sentencia, que debe terminarse «en cuatro semanas». Eso será seguido por una sesión informativa sobre el informe de la investigación previa a la sentencia dentro de seis semanas y «dentro de ocho semanas tendremos sentencia».
El presidente de EE.UU., Joe Biden, se refirió al veredicto en el juicio contra Derek Chauvin como algo inusual pero «un paso gigante en la marcha hacia la justicia en Estados Unidos».
«Hoy el jurado de Minnesota encontró al expolicía Derek Chauvin culpable de todos los cargos del asesinato de George Floyd», dijo el presidente desde la Casa Blanca.
«Fue un homicidio a plena luz del día y arrancó la venda para que todo el mundo lo viera… el racismo sistémico… una mancha en el alma de nuestra nación, la rodilla en el cuello de la justicia para los estadounidenses negros», continuó Biden. (CNN20/04/2021).
Opinión.salcosga@hotmail.com
@salvadorcosio1