El Real Madrid mantiene su estrategia de seguir a la espera de acontecimientos. En las oficinas del Bernabéu tienen muy buena relación con los dirigentes del PSG y además son conscientes de lo ocurrido en el pasado con jugadores como Verratti, Rabiot o Cavani, en los que los parisinos se mostraron inflexibles cuando pidieron abandonar el club de manera hostil. Por eso, en el Madrid creen que lo más peligroso es que el PSG se sienta atacado y adopte una posición similar a la ocurrida en esos casos.
Los dirigentes blancos se mantienen optimistas al ver la actitud de Mbappé. Es él quien debe mantenerse firme en su postura de no renovar, porque es la única vía para sacarle ahora de París. En ese caso, las opciones son: si el PSG se abre a negociar, el Madrid intentaría su fichaje este verano. No obstante, a día de hoy en el Bernabéu ven más factible la llegada de Mbappé en 2022, libre tras acabar su vinculación.
Leonardo, el director deportivo del club francés, ha mantenido hasta ahora que prefiere dejarlo marchar libre en año y medio antes de negociar una venta, puesto que crearía un precedente peligroso. Mientras esa postura siga así, el Madrid no va a entrar en una guerra que pueda poner en riesgo la operación. Centraría sus esfuerzos en que Mbappé aguante la presión…
Pochettino, entrenador del PSG, tuvo que responder a las preguntas sobre la situación de Mbappé en la conferencia de Prensa previa al partido contra el Barcelona de esta noche en París, aunque prefirió no mojarse sobre el asunto. “Es una situación que el club está manejando desde hace tiempo. Es una cuestión de jugador y club. Ahora estamos centrados en alcanzar los objetivos que nos hemos propuesto desde principios de la temporada”.