Mario Marín, ex Gobernador de Puebla detenido el día de ayer por elementos de la Fiscalía General de la República, se reservó su derecho a declarar y solicitó la ampliación del término constitucional, para llevar su proceso en arraigo domiciliario.
El “Gober Precioso” , como es conocido a nivel nacional, así como su defensa realizaron la solicitud bajo el argumento de que existía riesgo de contagiar del virus SARS-Cov-2, causante de la enfermedad de la COVID-19.
La abogada de la periodista Lydia Cacho, Araceli Andrade fue quien dio a conocer la información, además de confirmar que dicha petición fue negada por el Juez.
“Lo solicitaron, tanto su defensa como él, nosotros explicamos por qué no, y el Juez dijo no, ningún arraigo domiciliario en el término constitucional que es lo que ahorita estamos haciendo”, señaló la defensora.
Posteriormente, la jurista anunció que el ex Gobernador está enfrentando un sistema de juicio tradicional.
“El delito de tortura es grave, estamos en el sistema tradicional, no es el sistema actual, tan es así que incluso el primer judicial que se detuvo, José Montaño Quiroz, ya hasta cumplió su sentencia, salió el 19 de diciemebre”.
Mario Marín, "El Gober Precioso", fue aprehendido el pasado 03 de febrero durante un operativo en un inmueble de Acapulco, Guerrero, donde se localizaba con algunos familiares.
El ex mandatario estatal es acusado desde 2005 por el delito de tortura, en agravio de la periodista Lydia Cacho, quien escribió el libro “Los Demonios del Edén”, donde exhibe una red de pornografía y prostitución infantil que involucraba al empresario Kamel Nacif y varios políticos poblanos.