El domingo 24 de febrero de 2013, el técnico Benjamín Galindo mandó llamar de la banca a un jovencito. Traía el número 46 en la espalda. Su registro en la Federación Mexicana de Futbol decía Javier Eduardo López. Pero todos le llamaban “Chofis”. El entrenador de Chivas ordenó su ingreso al minuto 84 del partido ante León. Ese día, nació una promesa para el Rebaño Sagrado… pero nunca pudo convertirse en realidad.
Siete años y ocho meses después, Javier Eduardo López está fuera del equipo. Ha sido separado por reiterada indisciplina y este miércoles la directiva del Guadalajara anunció que en el próximo mercado de fichajes, saldrá del equipo con etiqueta de transferible, lo mismo que José Juan Vázquez y Alexis Peña, lo jugadores involucrados en el escándalo de Dieter “N”, quien ya fue cortado del plantel tras ser acusado de violación.
En el talento de “Chofis” creyeron todos y cada uno de los entrenadores que pasaron por Chivas. Especialmente Matías Almeyda, quien incluso pidió a Jorge Vergara mantenerlo en el equipo cuando el empresario había decidido ya venderlo ante la falta de resultados. Su pierna izquierda generó esperanza en la institución, pero al final se va por esa indeseable la puerta de la decepción.
“Tenemos una joya que ustedes irán viendo poco a poco, pero hay que cuidarlo, no soltarlo y guiarlo. Estoy seguro que será un gran jugador, una figura en México sin duda. Me he cansado de ver jóvenes que han sido quemados, acá se trata de que mantengan los pies en la tierra. Muchos lo comparaban con Messi, en cómo caminaba y cómo hacía su drible. Yo un día le dije, por ahí te pareces en la forma de caminar, pero Messi es Messi y ‘Chofis’ debe ser ‘Chofis’. Está en mí apoyarlo y levantarlo”, dijo Matías Almeyda.
Como él, otros creyeron en su talento. “Estoy cerca de él porque me gusta que brille, estoy hablando con él, buscando dónde puede jugar mejor. A veces es triste que sea tan abucheado. He visto que lo abuchean, lo cual no es agradable y vivir con esa presión no se puede. El chico para mí ha respondido muy bien, yo le digo que siempre haga jugadas de 10, le pido jugadas de cinco, de cuatro. Que no se sienta presionado por hacer la gran jugada todo el partido. Me gustan los buenos muy buenos jugadores y aparte de ser entrenador, debo estar ayudando a que desarrollen estos talentos”, señaló Tomás Boy.
Algunos le cuestionaron, para exigirle dar lo que su potencial hacía pensar. “Mientras no se decida a jugar y demostrar el talento que tiene o a tener una seguidilla de partidos, seguirá siendo la ‘Chofis’ de hace tres años . Cuando se decida, será un jugador extraordinario. Mientras quiera jugar dos partidos bien y tres mal, va a seguir siendo la ‘Chofis’ de 18 años que ya no tiene”, explicó José Saturnino Cardozo cuando lo dirigió.
Incluso tuvo el apoyo de amigos que lo defendieron de los señalamientos. “Creo que las críticas a él… no estoy de acuerdo con eso, se han metido mucho en su vida personal y creo que tiene todo el derecho de hacer lo que crea conveniente. Él es un jugador diferente, que tiene muchas cualidades y que sabe que trabajando, estando en su mejor momento, peleando por la titularidad, nos puede ayudar mucho. Hay que evaluarlo por lo que haga dentro del campo. Yo como compañero, lo quiero ayudar. No lo vamos a dejar que se vaya por otro lado, ni que le dé bola a las críticas”, señaló Ángel Zaldívar, quien lo conoce desde fuerzas básicas.
CUESTIONAMIENTOS Y SALIDA
Pero Javier Eduardo López nunca tuvo la consistencia que se esperaba. Con la camiseta del Guadalajara, vivió algún partido memorable, como el de Monterrey cuando le hizo dos goles a Rayados. Su eterno problema fue la irregularidad. Dos o tres partidos buenos por torneo no eran suficientes. La directiva aguantaba semestre a semestre.
Los cuestionamientos fueron severos en tiempos recientes. “Para mí es el jugador más talentoso del equipo, pero si no se decide, va a ser un jugador del montón. Eso yo se lo he comentado y creo que varios de nosotros. Todos saben del talento que tiene, pero le falta un tema de decisión, el querer trascender, de no conformarse. Creo qué pasa por un tema más mental”, declaró el capitán Jesús Molina.
Otro de los experimentados en el plantel, Oribe Peralta, se mostró contrariado con la forma en que Javier Eduardo López es incapaz de explotar todo el talento que tiene. “Te frustra, porque les dices qué es lo que está bien o lo que tú harías en su lugar. Luego, las decisiones son personales y van a tener sus consecuencias buenas o malas, dependiendo siempre de lo que hagas”, aseveró el “Cepillo”.
Finalmente, la directiva de Chivas anunció este miércoles las medidas disciplinarias que marcan el fin de la carrera de “Chofis” con el Rebaño Sagrado. Aquella promesa que en 2013 aparecía en Primera División no llegó a ser realidad. Al menos no con la camiseta del Guadalajara. Ahora, tendrá que buscar otro lugar para al fin explotar la zurda que tanto se esperaba en la Perla Tapatía.
