Luis Suárez reclamaba hace unos días en una entrevista a El País que estaba esperando una llamada de alguien del club para comunicarle su futuro, lamentando asimismo que su nombre estuviera en todas las listas de candidatos a una salida de la entidad. Pues bien, esta llamada, según Rac1, ya se ha producido. Fue el propio entrenador, Ronald Koeman, quien se puso en contacto telefónico con el delantero charrúa para comunicarle que no cuenta con él y que el club iniciará el proceso para buscarle una salida.
Así pues, Luis Suárez es la primera vaca sagrada que marchará del club. Hay que tener en cuenta que su contrato expiraba el 30 de junio de 2021, por lo que de los pesos pesados era la salida más viable: Sergio Busquets tiene contrato hasta el 2023 mientras que el de Jordi Alba se alarga hasta el 2024. De hecho, los últimos rumores apuntan que el lateral podría tener el beneplácito del holandés, pero con el ultimátum que esperan un año bueno en su rendimiento.
Su marcha también supone un adelgazamiento importante en la masa salarial del club: es el tercer mejor pagado de la plantilla, alcanzando los 24 millones de euros brutos por temporada. Otra cosa es el finiquito que tendrá que abonar el club y si finalmente el delantero perdona o no una parte del contrato que le queda en el club.
Evidentemente, el adiós de Luis Suárez supone un golpe muy duro para Leo Messi: el uruguayo se había convertido, desde su aterrizaje en el club en el 2014, en la sombra inseparable del argentino, compartiendo vivencias, tanto dentro como fuera de los terrenos de juego.
Suárez se marcha con el honor de ser el tercer máximo delantero de la historia del club, con un total de 198 goles en 283 partidos, a los que hay que sumar 109 asistencias.
Ahora habrá que ver el destino de Suárez. En principio, la intención del delantero sería marchar a la MLS, con el equipo de Beckham en Miami, aunque ya ha recibido una oferta de su ex equipo, el Ajax, que parece que no le acaba de convencer del todo.