Ustedes se han de acordar cuando empezamos con los primeros datos del hoy ya conocido coronavirus, o Covid-19, que se decía que en el país habían fallecido 30 personas, y decíamos en una especie de consuelo pírrico, “uhhh, ayer mismo nomás por la pura violencia mataron a 40, 50…”, al número de víctimas de determinado día, y luego decíamos: “tanto que nos cuidamos del coronavirus y en una sola noche mataron a balazos, quemados, decapitados, etcétera, etcétera, al triple de los que se murieron ayer de coronavirus”.
Les repito que esto era una especie de consuelo sin mucha ganancia, pues finalmente muertos eran unos y muertos eran otros, aunque sin embargo, las situación parecía que sería normal en el sentido que nos tenían acostumbrados los grupos delictivos, pero no fue así, con el transcurso de los días, las cosas fueron cambiando aunque sólo para un lado, y entonces la competencia por llevarse más muertos, se fue inclinando poco a poco a favor de la epidemia o pandemia llamada coronavirus, esto no significó de ninguna manera que las guerras entre el llamado crimen organizado menguaran y dejaran de matar tanta gente, de ninguna manera, las matanzas, venganzas, y crímenes, continuaron entre ellos, a la alza, sin miramientos tal y como marcan los cánones en estas cosas.
Pero sin embargo, poco a poco, a partir de marzo 18 del presente año, a medida que avanzaba el tiempo y el descuido de la ciudadanía para hacerse responsable de cuidar su vida ante la eventualidad de ser contagiada por alguien que tuviera el coronavirus, la pandemia le fue ganando en número de muertos diarios a la violencia del crimen organizado.
Es por eso que quizá a muchos no les sorprendió saber que este fin de semana hubo 280 personas muertas, a consecuencia del crimen organizado, o de hechos violentos entre pobladores por cuestiones políticas.
Así es en efecto, los días 19, 20 y 21 de junio, considerado el fin de semana del Día del Padre, 265 personas fueron asesinadas de acuerdo con el reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), tan solo el domingo fue el más violento con 103 casos, aunque a este mismo día se le deben agregar 15 personas más de Oaxaca, que las mataron a balazos, pero antes las quemaron y torturaron, sus propios vecinos del municipio, así que podíamos decir que de domingo para lunes tuvimos 118 muertos en forma violenta, y con esta cifra, bien les puedo decir que las cosas son para asustarnos, pero bueno, como en todas las cosas, cuando algo es grande, pero llega algo más grande, opaca al que parecía ser el ganador, y así es en estos casos el asunto del coronavirus, que tienen cuatro días matando a más de 700 gentes diario. Pero continuando con el fin de semana y las 280 personas asesinadas, Excélsior reporta que Sonora fue la entidad con más casos, con 14 homicidios, algunos relacionados con los hechos violentos ocurridos en Caborca.
En orden descendente le sigue Guanajuato, con 15 homicidios, particularmente en la ciudad de Celaya, tras la detención de integrantes del Cartel de Santa Rosa de Lima, encabezados por José Antonio Yépez Ortiz.
Por días, el viernes ocurrieron 71 homicidios violentos, en donde destacó el caso del Estado de México con 12 casos. Para el sábado 20 se contabilizaron 91 personas asesinadas; finalmente el domingo 21, durante las celebraciones del Día del Padre, fue el más violento del fin de semana, con 103 casos de acuerdo con informe Víctimas Reportadas por Delito de Homicidio, a través de Fiscalías Estatales y Dependencias Federales, a estos 103, le agregamos los indígenas de Oaxaca, que son 13 hombres y 2 mujeres, torturados, quemados y luego balaceados, o sea 15 personas más en total, y tendremos el domingo 118 crímenes.
Durante todo el fin de semana, Guanajuato fue la entidad con 43 casos, y en lo que va de junio han sido asesinadas mil 717 personas, para un promedio diario de 81.8 casos.
Respecto a los últimos 15 asesinados, entre el domingo y este lunes en el empobrecido estado de Oaxaca, sur de México, presuntamente por conflictos entre grupos políticos, informaron las autoridades que el fallecimiento de 2 mujeres y 13 hombres, presentan contusiones y quemaduras parciales, esto según reportó la fiscalía de Oaxaca.
Los asesinatos fueron perpetrados en una localidad de San Mateo del Mar, municipio ubicado a menos de 35 km del estratégico puerto de Salina Cruz, sobre el Pacífico, señaló la fiscalía sin dar más detalles.
El municipio, mayoritariamente indígena, es gobernador por Bernardino Ponce, cuya elección en 2019 es desconocida por una parte de los 13.000 pobladores.
"Torturaron, quemaron vivos y asesinaron a 15 de nuestros ciudadanos", dijo ayer lunes en un comunicado la alcaldía de San Mateo del Mar.
El despacho añadió que algunas de las víctimas fueron ultimadas "solo por (…) no someterse a los intereses de este grupo delincuencial que aspira a controlar el municipio por su ubicación estratégica para el tráfico de indocumentados y almacenamiento de combustible robado".
En resumen amigos, con 34.608 asesinatos en 2019 y casi 3.000 solo en abril pasado, México está envuelto en una espiral de violencia por el crimen organizado. El pasado fin de semana fue particularmente sangriento.
En cuanto al coronavirus, en la cuarta semana de la nueva normalidad, se registran en el país 22,584 fallecimientos y 185,122 casos positivos, de acuerdo con los últimos datos de Salud.
En las últimas 24 horas han fallecido 759 personas y se registran 4,577 casos confirmados.
México convive con la muerte todos los días. Por Covid-19 o violencia, los decesos no cesan en el país, pese a los esfuerzos gubernamentales que asegura emprender la actual administración.
En lo que va del 2020, se han registrado más de 36,456 decesos sumadas ambas causas.
De acuerdo con las cifras oficiales de homicidio doloso reportado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, los actos de este tipo en territorio nacional suman -de enero a mayo de este año- 14,631.
Y bien, da gusto que finalmente el señor presidente, ya opinó sobre el uso de la fuerza pública, contra la fuerza delincuencial, parece que está comprobando que a los delincuentes, realmente poco les importa que su mamá tenga vergüenza de que se dediquen a actividades delictivas, como era la premisa inicial de nuestro presidente, cuando decía que había que darles una oportunidad, e ir al motivo que los hacía delinquir, que probablemente era la falta de oportunidades, pero pues con los hechos registrados el fin de semana en Celaya Guanajuato, ya el señor AMLO, expresó ayer lunes, clara y textualmente: "No podemos permitir que se caiga en la anarquía y el desorden, y mucho menos que se pierdan vidas", esto en referencia a los operativos efectuados en ese estado.
Lo cierto amigos y amigas, que en esta guerra cuyo trofeo principal, es la muerte, o son los muertos, y que por ahora lleva la delantera el Covid-19, llegará el día en la que el llamado crimen organizado o la delincuencia organizada, vuelva a ganarle al coronavirus, para que esto ocurra no pasará mucho tiempo, en cuestión de que se logre de verdad aplanar la famosa curva de contagios, y listo, a medida que disminuyan las muertes por coronavirus, los fallecimientos por asesinatos, o por conceptos violentos, seguirán como hoy, altos, aunque los cientos de muertos diarios por el Covid-19, los hacen verse como poca cosa, así que la guerra tiene ya un vencedor predestinado…hasta mañana